Eliseu acepta el contrato a la baja y por una sola temporada

 

 

Firma por un solo año, con un sueldo bajo, y tanto sus emolumentos como garantizarse otra temporada dependerán de su rendimiento 

 

Era un ‘o lo tomas o lo dejas’, como gráficamente tituló SUR el lunes, y Eliseu al final ha debido conformarse. Como si fuera un plato de lentajas, el portugués se ha visto obligado a aceptar el estricto contrato ofrecido por el Málaga y lo firmó en la tarde de ayer, por un solo año, con un sueldo bajo y sujeto a distintas cláusulas para que su rendimiento esté muy encima del más que discreto ofrecido la pasada temporada.
Ya se sabía que el Málaga no iba a dejar tirado a Eliseu. Al fin y al cabo, así lo habían expresado los dirigentes en varias ocasiones. En el seno del club se le tiene la consideración de ‘uno de los nuestros’, pero al mismo tiempo esta pasada temporada se ha desbordado la decepción con él. Ni su rendimiento ni su comportamiento (fruto de distintos problemas personales) han sido los adecuados.
Eliseu terminaba su contrato el próximo día 30, de modo que desde el pasado 1 de enero tenía libertad para negociar con cualquier otro club. Es cierto que a él no se le pasaba por la cabeza marcharse de Málaga y que quiere retirarse en el equipo blanquiazul, pero en estos más de cinco meses tampoco ha tenido ofertas interesantes. «‘Eli’ se quedará», comentaban sus compañeros mientras avanzaba este 2014. Su evidente sobrepeso le pasaba factura y decantaba la balanza en su contra solo meses después de haber sido el máximo goleador malaguista en la Champions y el protagonista de tantos espectaculares en Bruselas o Milán.

Buena sintonía

Eliseu nunca estuvo fuera del Málaga, entre otras razones porque con el regreso de Mario Armando Husillos a la dirección deportiva el camino quedó más despejado. La sintonía entre ambos es total... aunque eso no quita para que el hispanoargentino le planteara desde el primer momento que debía rebajarse considerablemente su sueldo. Al final el portugués no ha tenido más remedio que aceptar una propuesta que lo obliga a no descuidarse.
El Málaga tenía que frenar como fuera la dinámica en la que había entrado Eliseu, cada vez con más sobrepeso. Incluso, el club le puso a su disposición un ‘coaching’ para buscar su reaparición física y mental, y a las primeras de cambio el jugador dejó de asistir a las sesiones.
Por eso, el club le ofreció desde el principio un contrato a la baja, con una ficha notablemente inferior a la que poseía y también más acorde a la nueva realidad económica de la entidad. Desde que tomaron las riendas, hace dos veranos, los actuales dirigentes están empeñados en rebajar la masa salarial de la primera plantilla, porque es obligado cubrirse las espaldas cara al futuro.
Pero además de ofrecerle un contrato con un sueldo a la baja, el que firmó ayer Eliseu solo tiene un año de duración. En función de su rendimiento el jugador mejorará sus emolumentos y también podrá ganarse otra temporada como malaguista. Las distintas cláusulas por partidos disputados, goles y ‘asistencias’ serán determinantes en la consecución de los objetivos impuestos por la entidad al portugués.
El sí de Eliseu despeja el panorama ligeramente, porque el Málaga estaba pendiente de tres situaciones en las bandas del centro del campo. Una ya ha quedado resuelta y ahora falta conocer si finalmente el club consigue traerse cedido un año más a Amrabat y si se refuerza en la derecha con otro futbolista o si, obligado por el condicionante económico, debe recurrir a algún futbolista de la cantera.